Por unanimidad, el Congreso del Estado de México solicitó a las secretarías, organismos descentralizados y desconcentrados estatales que implementen un programa para garantizar que en todos los edificios públicos, propios, arrendados o que se tengan bajo cualquier otra figura jurídica, destinados al servicio público, se ocupen energías renovables para satisfacer el 100por ciento de su consumo energético.
El llamado, explicó el diputado Gerardo Lamas Pombo, autor del punto de acuerdo en coordinación con el legislador Enrique Vargas del Villar, integrante y coordinador de la bancada del PAN, busca la transición escalonada para que al 31 de diciembre de 2023 25 por ciento de los edificios públicos o unidades administrativas sean abastecidos únicamente por energías renovables; 50 por ciento para el 31 de diciembre de 2024; 75 por ciento para el 31 de diciembre de 2025 y la totalidad para el 31 de diciembre de 2026.
Al exponer que uno de los retos más importantes de la presente generación es el cambio climático, el legislador compartió que julio de 2021 fue el mes más caliente en la historia de la humanidad, por lo que se tiene en las manos la oportunidad de frenar el cambio climático y brindar esperanza a la futuras generaciones.
Señaló que para generar la energía eléctrica no renovable en las casi seis mil unidades administrativas del gobierno estatal se liberan al año, en promedio, 258 mil 764.504 kilogramos de bióxido de carbono, que no se mitiga, ni compensa, contribuyendo de forma sustancial al cambio climático.